Hace unos días se celebró el Día Mundial del medio ambiente...esa denominación de "medio" me resulta algo rara: el ambiente es solo uno, o es que solo queda la mitad gracias al uso desmedido de los recursos?
Como sea, en la escuela de mi hijo están trabajando el tema y quisimos apoyarlo desde casa llevando a la práctica algunas de las ideas y propuestas que vieron en la clase.
Así que revolvimos entre los materiales que había por la casa para ver que podíamos hacer y terminamos en unos botellones de plástico que a partir de ahora, tienen un nuevo uso.
A partir de estos tres bidones de plástico vamos a fabricar una huerta vertical con un sistema de riego incorporado. Parece algo complicado? Para nada!
El primer paso es marcar un círculo que ocupe una de las caras del bidón cerca de la base, dejando unos 5 cm de distancia. Luego, cortar con trincheta, tijeras, etc.
En la base marcamos un círculo que debe tener el mismo diámetro del pico del botellón. Para hacer el corte usé una mecha copa y el taladro.
Con una mecha fina hice agujeros en las tapas para que funcionen como rociadores.
Las tapas son importantes porque van a cumplir la función de tope entre los bidones. Insertamos el pico de uno en el agujero posterior de otro (por eso es la importancia de respetar el diámetro) y trabamos con la tapa. De esa manera manera quedan unidos y evitamos que se separen.
Una vez que probamos las uniones, viene la pintura. Estos bidones van a servir de macetas y hay que proteger las raíces de la exposición a la luz así que pintamos la parte superior con pintura negra. Yo usé esmalte sintético mate porque era lo que tenía en casa, pero puede servir la pintura de pizarra o cualquier otra.
Con una esponja común de cocina corté unos trozos para poner en las tapas. De esta forma se evita que la tierra tape los agujeros que hicimos en ellas anteriormente.
Ya vamos terminando...Con un trozo de cuerda para colgar la ropa hice un colgante...
...y con la parte superior de otro bidón hice una especia de embudo o pico vertedor para que, al regar, el agua no caiga directamente sobre la planta sino que lo hará en forma de lluvia.
Acá esta el proyecto terminado. Agregamos tierra, semillas, sol...y esperamos!
Lo interesante de esta propuesta es que se puede modificar para hacer una huerta interior. Solo hay que agregar un botellón más al final para que reciba el agua excedente y cuando esté lleno se puede volver a usar para riego. Así, no cae agua al piso y es completamente limpio.
Y no hay que olvidar que este es el planeta que tenemos y que nuestros hijos tendrán...
Espero que les haya gustado. Dejen aqui sus comentarios, son todos bienvenidos!
ANIMARSE, ESE ES EL SECRETO!